Por Julia Pérez
El pasado mes de julio tuve la maravillosa oportunidad de viajar a la capital nórdica durante dos semanas. Muchos pensaréis que es un destino poco común para ir en verano. Y seguro que antes preferiríais viajar a un destino de sol y playa como las Canarias, o algo más exótico como Bali. Sin embargo, debo decir que a pesar de que es necesario meter una chaqueta y unos pantalones largos en la maleta, Oslo es sin lugar a dudas un destino del que no te arrepentirás.
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Cuando viajas a un país nórdico en un mes caluroso como verano, hay que dar por hecho que no vamos a tener buen tiempo todos los días. Por lo que es necesario llevar un chubasquero y un paraguas en la mochila todos los días. Ya que lo mismo llueve, que sale el sol. Digamos que el verano noruego es como la primavera en España.
Un punto a favor, por lo menos desde mi punto de vista, es que nunca llega a anochecer del todo. Tenemos luz natural las 24 horas del día. Esto te permite poder estar más tiempo en la calle y dar paseos por el bosque sin problemas. Aunque es necesario cerrar las cortinas a la hora de dormir si eres de esos que son incapaces de dormir con luz.
![Resultado de imagen de oslo](https://e00-elmundo.uecdn.es/assets/multimedia/imagenes/2017/11/22/15113451827358.jpg)
Al viajar en verano, te permite visitar parques y lugares que si fuese en otra estación del año, sería más difícil. Yo personalmente recomiendo visitar Vigeland Park, que es un parque de estatuas enorme e ideal para dar un paseo y perderse entre sus grandes jardines; el Museo del Pueblo Vikingo, un museo al exterior donde viajarás en el tiempo haciendo un recorrido a todos los tipos de viviendas en las que vivían los vikingos; la Fortaleza Akershus, un castillo medieval con vistas a todo el fiordo de la ciudad; y el lago Sognsvann, que te permitirá escapar del bullicio de la ciudad y disfrutar de un paisaje de película.
Así es viajar a Noruega durante los meses de verano. Es un destino ideal para aquellos que no sean muy admiradores del calor. Y, Oslo es una ciudad ideal, debido a que es bulliciosa y al mismo tiempo tranquila, puedes estar en el centro con sus grandes edificios y en diez minutos te encontrarás rodeado de naturaleza.